La abogada de Meghan afirma que el libro está lleno de inexactitudes y que sus autores se tomaron un sinfín de "licencias artísticas" a la hora de narrar anécdotas sobre los duques de Sussex.
La batalla legal que Meghan Markle mantiene con dos tabloides británicos sigue proporcionando, irónicamente, nuevos titulares a la prensa de Reino Unido incluso después de que el príncipe Harry y ella se mudaran a Santa Mónica, en busca de privacidad para criar a su hijo Archie.
Los nuevos documentos legales que ha presentado la abogada de la duquesa de Sussex ante el Tribunal Superior de Justicia y a los que ha tenido acceso el portal Daily Mail, uno de los medios a los que ella demandó por publicar una carta privada que le había enviado a su padre,reveló ahora qué piensa realmente la antigua actriz del libro Finding Freedom, que se publicó el pasado agosto.
En pocas palabras, el contenido de esa biografía no autorizada le pareció "extremadamente anodino" e "inexacto", según señaló su representante legal Jenny Afia, porque repetiría la misma información que había sidoque había sido publicada anteriormente en otros medios, adornada con detalles "inexactos".
Por ejemplo, el príncipe Harry y ella nunca habrían realizado una escapada juntos a Botsuana, como aseguraban los autores Omid Scobie y Carolyn Durand, ni tampoco se habrían reunido por primera vez con la madre de Meghan, Doria, en Los Ángeles para que su hija pudiera presentarle formalmente a su entonces novio.
La duquesa de Sussex también insistió en que su primera cita con el nieto de Isabel II no se desarrolló de la forma en que recoge Finding Freedom, para dejar claro que en ningún momento colaboró en su creación. De esta forma De esta forma espera echar por tierra uno de los argumentos que acusan los demandados, que sostienen que ella no tendría ningún reparo en permitir que se hagan públicos detalles de su vida privada, siempre que sea en términos que resulten "favorables y halagadores" para su imagen.
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